Los hombres, que consumían licor en uno de los establecimientos del municipio, se negaron a pagar la cuenta y al pedir más trago y que no se los vendieran, con una escopeta, amenazaron al hombre que les vendía y a las dos mujeres.
El grupo de delincuentes, de nacionalidad venezolana, decidió amarrar a las víctimas y golpearlas.
No contentos con eso, robaron sus pertenencias, les quitaron la ropa robaron trago, los secuestraron y además abusaron sexualmente de las mujeres.
Tras las denuncias, los hombres fueron capturados por la Policía y judicializados.
El grupo de delincuentes, de nacionalidad venezolana, se les imputó los delitos de secuestro simple, acceso carnal violento en concurso homogéneo y simultáneo agravado, tráfico, fabricación y porte de armas agravado y hurto calificado y agravado.