El hombre estaba a simple vista, bien cambiado, quizás para pasar desapercibido. Pero la realidad para los guardas de seguridad del sitio fue otra.
Resulta que cuando intentaron detenerlo, el individuo, según lo que manifiestas testigos, sacó un machete con el que, además de amenazar a los funcionarios, cortó a uno de ellos en una de sus manos.
Quienes presenciaron el hecho, les causó indignación, por lo que alertaron a los uniformados de la Policía para que controlaran la situación.
Los patrulleros hicieron presencia y lograron reducirlo. Un curioso grabó varios minutos lo que estaba sucediendo.
En el material fílmico se ve, no solo el vehículo del hombre, sino, la motocicleta de los policías que terminó arrollada y debajo del automotor.